Blog
CONVIVENCIA SIN FRICCIÓN EN CONFINAMIENTO
- 1 de agosto de 2020
- Publicado por: EducaConsultores
- Categoría: Blog CRECIMIENTO PERSONAL

Al confinamiento es posible sacarle el mejor provecho y obtener grandes aprendizajes. ¿Cómo lograrlo? necesitamos estrategias para mantener un ambiente saludable en casa durante cada día de confinamiento.
Aunque es una batalla que podemos ganar al final de esta etapa, el confinamiento social prolongado podría perturbar muchas de las relaciones familiares, generar fricciones entre sus miembros, irritabilidad y frustraciones. Frente a esta situación, es importante buscar apoyo de terceros que nos de estrategias, algunos especialistas recomiendan crear:
- Espacios de diálogo
- Practicar el respeto
- Tolerancia
- Formarse nuevas rutinas, entre otras cosas…
Tanto lo emocional como el resto de las áreas, requieren de intencionalidad para lograr los resultados de equilibrio que anhelamos en casa. Mantener una rutina familiar, ayuda a eliminar la sensación de incertidumbre y a guiar más fácilmente a nuestros hijos para que perciban un ambiente inalterado y refuercen el equilibrio emocional, necesario para su educación y desarrollo personal.
La pandemia viene generando cambios a todo nivel en la estructura de la vida y de la sociedad. Antes los padres realizaban labores fuera de casa, pero ahora, al estar en el hogar desde el desayuno hasta la cena, se debe aprovechar este espacio y tiempo para enriquecer y poder ajustarnos a esta situación. Sin duda, la familia, de no ser un tema constante de conversación y discusión, podría sufrir muchos problemas por este presente confinamiento. Es necesario adaptarse a la convivencia, con tolerancia y aceptación, normas y límites, a fin de evitar que esta situación derive en inconvenientes, conflictos de intereses, conflictos por el espacio, etcétera.
¿Cómo saber cuándo están las cosas en casa bajo control o cuando acudir a un especialista en esta área?
Cuando algunos de los miembros del grupo familiar tienen manifestaciones poco controladas en su temperamento y en sus emociones de manera reiterada, afectando la normal dinámica familiar y la estabilidad emocional del hogar, cuando el simple diálogo no funciona y se desproporcionan las condiciones, cuando estas expresiones generan alejamiento, aislamiento, molestia constante, tristeza y desapego constantes en uno o más miembros de la familia. Entonces en ese momento hay que considerar el apoyo de un profesional para evitar que estas fricciones se prolonguen en el tiempo y taiga consecuencias futuras en la relación familiar.
¡No decidimos lo que nos pasa, pero sí la actitud con la que afrontamos nuestra realidad!
Si deseas completar esta información visita nuestro espacio de eventos.